Nos lo cuenta Yonderboy en Barrapunto (¿De quién son las lenguas?):
pobrecito hablador nos cuenta: «Leo en Terra que el pueblo chileno de los mapuches ha amenazado a Microsoft con demandarla si se atreve a realizar una versión de Windows en su lengua, lo cual, según ellos, viola sus derechos. Espero que esto no anime a Microsoft a patentar el resto de idiomas para los que distribuye el Windows. ;-)» Varias cosas: 1) traducir Windows a una lengua no es lo mismo que patentar esa lengua (las lenguas de hecho no pueden patentarse). 2) la lengua (cualquier lengua) es un bien común de creación colectiva: es de todos los hablantes en general y de ninguno en particular, sea caudillo mapuche o caudillo de Redmond. 3) El líder mapuche denuncia "piratería" por parte de Microsoft, asumiendo que le asiste un supuesto derecho natural (ancestral) de propiedad sobre la lengua. Los propios mapuches están muy divididos con el asunto.
Coincido con Yonderboy en que la oposición mapuche no tiene fundamento. La lengua es un "común" y su apropiación legal por un colectivo nos llevaría a la tragedia de los anti-comunes (los costes reducirían su utilización condenandola a su desaparición más allá de los museos y academias). Además la posición mapuche, posiblemente, vaya en contra de sus propios intereses; no ya por que no puedan "disfrutar" de Windows en su propio idioma, más bien por que su postura está en cierta medida legitimando la política de Microsoft sobre patentes y propiedad intelectual (y los países en desarrollo les interesa modelos de innovación open source).
Pero por otra parte, la cosa tiene su gracia, y podría ayudar a que algunos piensen si existen límites a las patentes ...