Hace tiempo comentaba los problemas que no se discuten habitualmente del proyecto One laptop per child (OLPC) que lidera Negroponte (inicialmente desde el MIT y ahora desde una fundación independiente). En resumen, mi principal crítica estaba centrada en el “modelo de negocio” basado en una burocracia masiva. Las noticias posteriores confirmaron esta sospecha: el proyecto pretende vender exclusivamente a gobiernos y establece pedidos mínimos de un millón de unidades. Algunos de los países que ya han anunciado su disposición a comprar al menos un millón de unidades pretenden utilizar su entrada en el proyecto como argumento para convertirse en ensambladores. De este modo, el objetivo del proyecto se pervierte y muy posiblemente el incentivo para que los portátiles lleguen a sus destinatarios y sean utilizados en educación se diluya. No hay lugar para la iniciativa privada ni para los proyectos locales; sólo tiene cabida la inversión pública y las decisiones centralizadas. En resumen, todos los ingredientes para que el proyecto sea un fracaso, o al menos eso ha sucedido ya con proyectos previos de ese tipo que pretendían generar desarrollo en países pobres.
Pero a Negroponte le ha surgido un nuevo problema que se llama Municator, un nuevo modelo de portátil que una compañía china pretende vender por 150 $, pero que a diferencia del proyecto OLPC se basa en una iniciativa empresarial rentable sin necesidad de ayudas públicas y en una tecnología que ya es una realidad (el proyecto OPLC cuenta aún con muchos aspectos sin definir: por ejemplo la famosa manivela desaparece o cambia de diseño cada poco tiempo). En Ars Technica han publicado un articulo (Chinese company produces US$150 Linux PC) con todos los detalles del proyecto chino:
A Chinese company called YellowSheepRiver wants to make affordable budget computing a reality with its new US$150 Linux Municator, a highly compact and innovative PC built with inexpensive Chinese hardware components. Although MIT's much touted US$100 Linux laptop has yet to transcend its status as vaporware, YellowSheepRiver already has a working product which could potentially be available for purchase within the next three months.
La tecnología empleada en el Municator supera al portátil del MIT. Es un portátil “normal”, con hardware “normal” y software libre y “normal”. No han necesitado diseñar nuevos componentes ni software específico (aunque se podrá hacer en el futuro sobre un producto estable y testado):
Urging potential customers to "Say no to Wintel," YellowSheepRiver is devoted to using its own Linux distribution and hardware designed and manufactured by Chinese companies. YellowSheepRiver hopes to close the "digital divide" by making computer technology available to the Chinese public at an affordable price. The Municator, which comes with 256MB of RAM, uses a unique 64-bit CPU with an instruction set based on a subset of the MIPS architecture. Designed by a Chinese company called BLX, the the cheap chip is clocked at 400 or 600MHZ and supposedly provides performance comparable to that of an Intel P3. Unlike MIT's laptop, the Municator is not designed to be a mobile computer. Rather than using an LCD display, it features support for S-video and VGA which will enable it to interface with televisions and monitors. For storage, the Municator comes with a 40 GB external USB drive and support for an optional external optical drive. With four USB 2.0 ports and built-in ethernet support, the Municator is quite capable of supporting other external devices and connecting to the Internet. According to the YellowSheepRiver web site, integrated WiFi and a lithium-ion battery pack are also available options.
The Municator comes with a lightweight Linux distribution based on RP Linux, a reference implementation for Chinese Linux distributors. The Municator also comes with a variety of commonly used Linux applications including Firefox, Gaim, Red Office, Thunderbird, and Mplayer. The Municator doesn't use a standard Linux desktop environment; instead it provides a very simple menu-based interface that can be operated with either the keyboard or the mouse.
Aside from the target market of budget computer users, I can think of countless potential uses for Municator technology. A US$150 Linux PC would be a great choice for school computer labs, hospitals, and countless other venues where there is a need for simple Internet access on cheap hardware. With an optional battery pack, the slim 7 x 5.7 x 1.5 inch form factor and the inherent flexibility of Linux software could make the Municator a good system for wearable computing enthusiasts. I can even imagine consumers integrating Municators into cars and other vehicles.
Si el Municator tiene éxito, se abren enormes posibilidades tanto en países en desarrollo como en los ya desarrollados (por ejemplo, por 150 $, este portátil se convierte prácticamente en un componente desechable utilizable en las más diversas contextos). Además, es de esperar que puedan reducir el precio con el tiempo, mientras que el OLPC tiene verdaderos problemas paramantener el precio prometido, y las últimas noticias hablan de que en realidad el coste será superior.
Lo más curioso de esta historia es que el OLPC nace en la cuna del capitalismo pero se caracteriza por un intervencionismo absoluto. Por el contrario el proyecto chino utiliza los mecanismos de mercado y la iniciativa empresarial a pesar de nacer en un régimen político comunista. Cada ve es más evidente que existe un desacoplamiento entre los modelos económicos y los políticos que genera paradojas interesantes y de consecuencis difíciles de predecir.